Hoy les traemos una breve reseña del documental Chasing Ice (2013).
Si bien ya tiene varios años desde su estreno, vale la pena mencionar y recordar porque nos muestra una realidad dramática presente en algunas partes del mundo, principalmente Groenlandia, Islandia y Alaska, siendo este último el lugar donde se desarrolla el cortometraje.
La cinta nos relata el trabajo del fotógrafo James Balog, quien a pesar de ser escéptico de los efectos del cambio climático, busca retratar con fuerza a través de las cámaras los cambios que se están dando en los glaciares del hemisferio norte y poder evidenciar él mismo estos cambios al mundo.
A lo largo de su travesía podremos ver cómo logra instalar 25 cámaras, aunque no sin complicaciones, que registraron el retroceso de los hielos milenarios durante más de 3 años, junto con lograr registrar el mayor desprendimiento del que se tenga registro, en el glaciar Ilulissat.
Sin duda un documental impactante que nos muestra de forma empírica cómo los glaciares están retrocediendo. Aunque el registro no contempla otras grandes masas de hielo en el hemisferio sur, el impacto del cambio climático no nos resulta ajeno a nuestra realidad, ya que solo a lo largo del 2017 tuvimos noticias de grandes desprendimientos en los glaciares O’Higgins y Grey, como también en la Antártica un mega desprendimiento en la plataforma Larsen C.